Ya sabemos cómo funciona Microsoft en lo que respecta al hardware de los teléfonos que vayan a usar su sistema operativo: ellos definen unas especificaciones mínimas a cumplir, y prácticamente todos los teléfonos aparecidos son muy similares.
La especificación actual parece que se va quedando corta, sobre todo si echamos un ojo a Android. Otra cuestión es si realmente la competencia está sacando partido de ello, ya que la idea de optimizar el software con el hardware no parece mala en Windows Phone 7, y los usuarios pueden interpretar que están siendo bien cuidados sin la sombra de una posible fragmentación.
Como es lógico, Microsoft no está sentada viendo cómo será la segunda generación de teléfonos a nivel hardware. Dos puntos son especialmente críticos, los procesadores de doble núcleo, y la conectividad LTE.
En una entrevista al vicepresidente de la división, Andy Lees, en AllThingsD, informó que estaban trabajando actualmente en ello. La idea de la empresa de Redmond es actualizar a esta especificación cuando el software y las necesidades lo demanden no por estar protagonizando una carrera tecnológica.
Sobre la conectividad LTE, es un tema más delicado, ya que la velocidad de transferencia y el uso de redes más modernas son siempre bienvenidas. Microsoft considera que ellos quieren subirse al carro cuando el consumo de batería de esta tecnología esté más optimizado. Ya se escuchan rumores sobre un desarrollo conjunto a Qualcomm, basada en sus Snapdragon S3.
Microsoft nos invita a esperar a la próxima gran actualización de l sistema operativo móvil, de la misma forma que han conseguido con Mango, ellos quieren dar pasos de gigantes con cada nueva versión.
Vía | AllThingD
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