Al final lo que Microsoft busca es hacer que su plataforma Windows Phone crezca - además de ganar dinero -, y es una realidad que en los últimos trimestres ha habido mejoría, principalmente gracias a Nokia, pero recortar terreno con Android e iOS parece cuestión de años.
En Redmond consideran que pasando a ser directamente el principal fabricante la cosa marchará de forma más rápida. En las nuevas previsiones de Microsoft está tener el triple de la cuota de mercado actual en 2018: del 4% actual a superar el 15% en unos cinco años.
El primer paso en este camino parece estar consiguiéndose con Nokia como compañía independiente, ya que superaron a BlackBerry en las últimas cuotas de mercado, y la industria en general ya los considera la tercera opción.
La pregunta que se nos viene a la cabeza es si esa cuota la van a conseguir bajo la marca Microsoft, o teniendo en cuenta el trabajo de otros fabricantes, ya que no van a cerrar las puertas a licenciar el sistema operativo. Otra cuestión es ver el interés que tienen los demás, teniendo la competencia en Microsoft. Ya experimentamos una mala acogida cuando Surface apareció en el mercado.
En la parte económica a corto plazo, Microsoft cree que va a salvar 600 millones de dólares. Nos cuentan que estaban ganando menos de 10 dólares por dispositivo con Nokia, y que la cifra pasará a estar por encima de los 40 dólares cuando los teléfonos sean producidos por ellos.
Vía | All Things D
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