La minería urbana en la telefonía móvil

La minería urbana en la telefonía móvil
Facebook Twitter Flipboard E-mail

Como ya comentabamos, no sólo Nokia está interesada en el reciclaje de teléfonos móviles. Cada vez más empresas valoran la reutilización de los elementos que componen los terminales, sobre todo si estos son elementos tan valiosos como el oro o la plata, porque debemos saber que hay una gran cantidad de metales preciosos en los teléfonos móviles.

Rescatar estos metales es lo que se denomina minería urbana, un negocio cada vez más rentable, debido al valor que están alcanzando estos metales. La mayoría de elementos recuperados se reutilizan en nuevos componentes electrónicos, pero otros como el oro o la plata se funden para ser vendidos como lingotes.

Supongo que por muchos de vosotros es sabido que el oro es mejor conductor de la electricidad que el cobre, y es la razón por la que cada vez más se está utilizando en las pequeñas circuiterías de los teléfonos móviles, pero incluso el caso del cobre es interesante ya que está alcanzando precios muy altos y su reciclaje es también una operación rentable.

Si queremos comparar los datos obtenidos con respecto a una mina convencional, podríamos decir que una tonelada de mineral de oro contiene una media de 5 gramos reales de oro, mientras que una tonelada reciclada de los teléfonos móviles contiene 150 gramos de oro. Además de esta clara rentabilidad los "mineros urbanos" no tienen un trabajo tan peligroso, no hay explosivos, ni condiciones de trabajo extremas, consiguiendo unos valores de 890 dolares por onza de oro.

No sólo el oro está presente dentro de nuestros terminales, también los citados cobre y plata, u otros como el estaño y el iridio. Para hacernos una idea, una tonelada de teléfonos contienen 100 kg de cobre y 3 kg de plata. Quizás no haya tantos teléfonos en el mundo como para generar todo los elementos necesarios, pero lo que si está claro es que es un negocio muy rentable y bastante menos peligroso que una mina convencional.

Vía | Mobilecrunch.

Comentarios cerrados
Inicio